sábado, 15 de diciembre de 2018

Condenan a exdirectivos de Ford por complicidad con dictadura argentina

Carlos Gareis (D), extrabajador de Ford y expreso político, su hija Estela (I) y la presidenta de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Nora Cortinas, celebran la condena de dos exdirectivos de Ford, el 11 de diciembre de 2018, en Buenos Aires

Dos exdirectivos de Ford en Argentina fueron condenados este martes a 12 y 10 años de prisión por ser partícipes necesarios en la privación ilegal de la libertad y en tormentos a obreros que actuaban de delegados sindicales de la empresa, durante la dictadura en este país (1976-1983).

Se trata del primer juicio en Argentina contra exdirectivos de una multinacional por delitos vinculados con la dictadura, calificados como de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptibles.

"Es una reivindicación del movimiento obrero argentino que fue un objetivo principal de la dictadura con complicidad de las empresas. Este juicio viene a comprobar que eso fue lo que ocurrió", declaró a la AFP Tomás Ojea, abogado de las víctimas que había pedido condenas de 25 años, tras escuchar el fallo.

Agregó que "el próximo paso va a ser contra la empresa misma. Vamos a evaluar los pasos para que la empresa rinda cuentas, tiene que dar explicaciones", advirtió.

Al cabo de un año de proceso oral, el Tribunal en lo Criminal de San Martín condenó a 12 años de cárcel al exjefe de seguridad de Ford Héctor Sibilla y a 10 años a Pedro Müller, exgerente de manufactura de la automotriz.

Este juicio penal se limita a determinar la responsabilidad de los acusados y no involucra a la empresa.

El tribunal fijó para el próximo 15 de marzo la audiencia en la que se darán los fundamentos de la sentencia. Aunque no se ha publicado, los abogados piensan que la pena a Sibilla fue más elevada porque se demostró que presenció una sesión de torturas.

Sibilla, de 91 años, y Muller, de 86, estuvieron presentes en la audiencia. Tras la lectura del fallo, salieron inmediatamente del tribunal, acompañados por sus abogados, sin hacer declaraciones.

Algunas personas les gritaron en la calle cuando se dirigían caminando a tomar sus autos.

Por ahora tienen régimen de presentación mensual ante la justicia y prohibición de salida del país, pero deberán cumplir la condena en la cárcel una vez que quede firme, aclaró el fallo, que fue recibido con aplausos y llantos por parte de sobrevivientes y familiares, que se fundieron en abrazos.

"Llegamos. Si no hubiese sido por la voluntad y el apoyo de la gente, no habríamos llegado. Pero el tema de los derechos humanos está bien implantado (en Argentina), ya no se discute", declaró a la AFP Pedro Troiani, una de las víctimas.

- "Como a los nazis" -

"Como a los nazis les va a pasar, adonde vayan los iremos a buscar", cantaron los asistentes como una explosión tras escuchar el veredicto presenciado por casi un centenar de personas, mientras otras tantas se agolpaban en una sala contigua para seguir la sentencia a través de un televisor.

En el mismo fallo, también fue condenado a 15 años de prisión el exgeneral Santiago Riveros, quien dirigió el centro de detención clandestino Campo de Mayo, al norte de Buenos Aires y emplazado cerca de la sede de la fábrica.

El militar, que cumple prisión por otras condenas por delitos de lesa humanidad, fue sentenciado como "coautor de allanamiento ilegal de vivienda y de privación ilegal de la libertad".

Previo a la lectura del veredicto, Müller fue el único de los acusados que hizo uso de su derecho de palabra.

"Yo solo quiero hablar de mi vida personal. Llegué al país en diciembre de 1949 y al mes encontré trabajo como mecánico automotor y así financié mis estudios. Desde entonces nunca paré de trabajar. Me di cuenta que tenía que trabajar de manera apolítica. Tengo la conciencia tranquila porque nunca se me podrá acusar por mi conducta", declaró el exjefe de manufactura de Ford.

- El caso Ford -

En 1976, cuando se produjo el golpe de Estado que desalojó de la presidencia a María Estela Martínez de Perón, trabajaban en la planta de Ford unos 5.000 obreros y 2.500 empleados administrativos.

En total había cien delegados gremiales, de los cuales 24 fueron tomados cautivos, muchas veces en sus mismos puestos de trabajo y con listas elaboradas por la empresa, en represalia por su activismo sindical, según la acusación.

Además, varios fueron torturados en la propia planta, ubicada en la localidad General Pacheco, en la periferia norte de Buenos Aires, antes de ser trasladados a centros clandestinos de detención, según los testimonios de las víctimas.

Aunque todos sobrevivieron a la dictadura, al cabo de más de 40 años solo siguen vivos 13 de esos delegados.

El exgerente de relaciones laborales Guillermo Galarraga llegó a estar procesado, pero falleció en 2016 sin que hubiese comenzado el juicio. Nicolás Courad, expresidente de Ford en Argentina, murió en 1989, mucho antes de que se iniciase cualquier diligencia judicial.

Casos similares han sido denunciados en otras compañías, como Mercedes Benz, Renault y Fiat, pero hasta ahora solo el juicio contra los exejecutivos de Ford ha podido llevarse a cabo.

Exigencia de la RED NACIONAL DE SITIOS DE MEMORIA DE URUGUAY

Uruguay, diciembre de 2018
DECLARACIÓN  

El pasado 4 de julio se aprobó la Ley de Sitios de Memoria de Uruguay, y el 31 de octubre se constituyó la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria en cumplimiento de dicha ley.

Los Sitios de Memoria, por su valor testimonial, constituyen instrumentos a disposición de los Estados para cumplir sus obligaciones en materia de Justicia, Verdad, Memoria y Reparación. Una Política Pública de Sitios de Memoria tiene por cometido el reconocimiento y preservación integral de los Sitios de Memoria, por lo que el Estado tiene el deber de garantizar su preservación, su funcionamiento, gestión y sustentabilidad.

Son numerosos, y no son casos aislados, los atentados que se han realizado últimamente contra diversos sitios y marcas: las Placas de Memoria colocadas por Luis Batalla; por Ruben Canziani; en el Cuartel de los 33 – ex Centro General de Instrucción para Oficiales de Reserva (CGIOR); en el Hospital Militar; en el callejón de la Universidad en Memoria de los Mártires Estudiantiles; en Fusileros Navales (FUSNA); en el puerto donde se recuerda el regreso de Wilson Ferreira Aldunate; en la casa del Contralmirante Oscar Lebel; en la Marca de Homenaje a Julio Castro en Salinas; en la estela del Circuito de Memoria de Salinas; en el Memorial del Penal de Libertad; en el Memorial a los Detenidos Desaparecidos en el Cerro de Montevideo, y en días pasados, el robo de las Placas de Memoria que señalizan el Batallón 13 y el Servicio de Material y Armamento donde funcionó el Centro Clandestino de Detención y Tortura “300 Carlos”.

La Red Nacional de Sitios de Memoria repudia estos actos, reafirma su fin de promover la democracia y vigencia de los derechos humanos mediante la recuperación, construcción y difusión de las memorias colectivas, a través de los Sitios y Espacios de Memoria; llama a las autoridades competentes a cumplir sus obligaciones, investigando cada uno de esos episodios, identificando y responsabilizando a sus autores, y tomando las medidas necesarias para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir; y exhorta a la sociedad toda a participar en la construcción de la Memoria Colectiva, Plural y Democrática.  


RED NACIONAL DE SITIOS DE MEMORIA DE URUGUAY